sábado, octubre 29, 2005

Adios a las armas


Con enorme entusiasmo El imitador de voces emprende la sexta lectura de Adios a las armas, la emblematica novela de Ernest Hemingway. Para nuestro amigo El imitador la relectura de esta hermosa obra no solo representa volver a disfrutar de una de las prosas que mas han marcado su vida de lector, tambien significa recorrer varias etapas de su propia vida, especialmente la del adolescente solitario y complicado que abrio este libro por primera vez en el año 1997 sin muchas esperanzas de encontrar en el algo muy diferente de los demas. Le faltaban algunas paginas hacia la izquierda para comprender que estaba quiza delante de el libro y el escritor mas importante de su vida. Sucedio despues lo mismo con otros libros del mismo autor, la emocion estetica superada en cada relectura. Algo muy vinculado tambien al deseo de dar vida a las cosas que se aman por siempre y siempre. Hemingway, un escritor que nunca muere. Su obra, eterna. Mientas viva este nuestro amigo, El imitador de voces, al menos...

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